Por Laurie Chen y Trevor Hunnicutt y Jeffrey Dastin
WASHINGTON, 20 nov (Reuters) -Responsables estadounidenses han dicho en privado que podrían no imponer pronto los aranceles a los semiconductores prometidos desde hace tiempo, lo que podría retrasar una pieza central de la agenda económica del presidente Donald Trump.
Los altos cargos transmitieron estos mensajes en los últimos días a las partes interesadas en el Gobierno y la industria privada, según dos personas con conocimiento directo del asunto y una tercera persona informada sobre las conversaciones. Una cuarta persona que sigue el asunto también dijo que el Gobierno estaba adoptando un enfoque más cauteloso para evitar provocar a China. No se ha informado previamente de las conversaciones.
Los asesores de Trump se están tomando su tiempo sobre los aranceles a los chips, ya que trabajan para evitar una ruptura con Pekín sobre cuestiones comerciales, lo que pondría en riesgo un retorno a una guerra comercial de represalias y la interrupción del flujo de minerales críticos de tierras raras, de acuerdo con dos de las fuentes.
Estas personas advirtieron de que ninguna decisión es definitiva hasta que el Gobierno la firme y también dijeron que podrían imponerse aranceles de tres dígitos en cualquier momento. Las fuentes hablaron de forma anónima para relatar conversaciones privadas sobre las deliberaciones políticas.
Trump dijo en agosto que Estados Unidos impondría un arancel de alrededor del 100% a las importaciones de semiconductores, pero eximió a las empresas que están fabricando en Estados Unidos o se han comprometido a hacerlo. En privado, durante los últimos meses, los responsables de Washington habían dicho a la gente que el Gobierno desplegaría los aranceles pronto. Esta orientación ha cambiado, ya que el Gobierno sigue debatiendo el calendario y otros detalles.
Un portavoz de la Casa Blanca y un responsable del Departamento de Comercio, preguntados sobre las discusiones, negaron que el Gobierno hubiera ajustado su postura.
“El Gobierno de Trump sigue comprometido a utilizar todas las palancas del poder ejecutivo para recuperar la fabricación que es crítica para nuestra seguridad nacional y económica”, dijo el portavoz, Kush Desai. “Cualquier informe de fuente anónima que sugiera lo contrario son simplemente noticias falsas”.
El responsable de Comercio dijo: “No hay ningún cambio en la política del departamento respecto a los aranceles de la Sección 232 sobre semiconductores”. Ninguno de los dos especificó qué tan pronto se finalizarían los aranceles con los que se ha amenazado desde los primeros días del Gobierno de Trump, ni ofrecieron ningún otro detalle.
La embajada china en Washington dijo que la cooperación entre los dos países en semiconductores es el mejor enfoque. “Damos la bienvenida a Estados Unidos a trabajar con China para implementar el consenso alcanzado en la cumbre de Busan entre los dos jefes de Estado, crear un entorno favorable para la cooperación mutuamente beneficiosa entre empresas de ambas partes y mantener conjuntamente la estabilidad de la cadena de suministro global de semiconductores”, dijo el portavoz, Liu Pengyu.
(Información de Laurie Chen en Pekín, Trevor Hunnicutt en Washington y Jeffrey Dastin en San Francisco; información adicional de Alexandra Alper en Washington; edición de Chris Sanders, Matthew Lewis y Jacqueline Wong; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)











