Por Max A. Cherney
SAN FRANCISCO, 14 oct (Reuters) – Broadcom lanzará el martes un nuevo chip de red que ayudará a las empresas a crear sistemas informáticos de inteligencia artificial encadenando cientos de miles de chips que procesan datos, lo que profundiza su rivalidad con Nvidia.
El chip, llamado Thor Ultra, permite a los operadores de infraestructuras informáticas desplegar muchos más chips de los que podrían desplegar de otro modo, lo que les permite construir y ejecutar los grandes modelos utilizados para impulsar aplicaciones de IA como ChatGPT.
El Thor Ultra luchará contra los chips de interfaz de red de Nvidia y pretende afianzar el control de Broadcom sobre las comunicaciones de red en los centros de datos diseñados para aplicaciones de IA.
Esto se produce después de que Broadcom reveló el lunes un acuerdo para desplegar 10 gigavatios de chips personalizados para OpenAI, desarrollador de ChatGPT, a partir de la segunda mitad de 2026, desafiando así el dominio de Nvidia en el mercado de aceleradores de IA.
La IA representa una gran oportunidad para Broadcom. A finales del año pasado, Hock Tan, presidente ejecutivo de Broadcom, dijo que el mercado que la empresa persigue con sus diversos chips de IA se sitúa entre 60.000 y 90.000 millones de dólares en 2027, divididos entre sus chips de red y los procesadores para centros de datos que ayuda a fabricar a Google, de Alphabet, y OpenAI.
Broadcom declaró unos ingresos por IA de 12.200 millones de dólares en el año fiscal 2024. En septiembre, anunció un nuevo cliente no identificado de 10.000 millones de dólares para sus chips personalizados de IA para centros de datos.
El chip Thor Ultra, que forma parte del creciente catálogo de chips de red de Broadcom, funciona como un enlace fundamental entre un sistema de IA y el resto del centro de datos. Los chips de red ayudan a los operadores de centros de datos a mover la información dentro de una instalación.
“En el sistema de computación distribuida, la red desempeña un papel extremadamente importante en la construcción de estos grandes clusters”, dijo a Reuters Ram Velaga, vicepresidente senior de Broadcom. “Así que no me sorprende que cualquiera que esté en el negocio de las GPU quiera asegurarse de participar en la red”.
CENTRARSE EN EL DISEÑO DE CHIPS
Aunque los chips de red son cruciales para los planes de la compañía, los chips de IA que Broadcom ayuda a diseñar para grandes empresas de computación en la nube como Google son lucrativos.
Broadcom ha trabajado en múltiples generaciones del procesador Tensor de Google, que Google comenzó a diseñar hace más de una década. Los chips Tensor han generado miles de millones de dólares en ingresos para Broadcom, según las estimaciones de los analistas.
Durante una visita en septiembre a los laboratorios de pruebas de chips de red de Broadcom en San José, donde los ingenieros trabajan en los diseños actuales y futuros de sus chips de red, los ejecutivos de la empresa detallaron las medidas adoptadas para construir y probar nuevos procesadores de red.
Para ello, los ingenieros de Broadcom han duplicado el ancho de banda de Thor Ultra con respecto a la versión anterior. Sometieron los chips a rigurosas pruebas y evaluaciones desde las primeras fases de producción.
Para fabricar un chip como el Thor Ultra o la serie insignia de conmutadores de red Tomahawk, los ingenieros construyen todo un sistema en torno al chip. Con el equipo del sistema de hardware, los ingenieros analizarán qué tipo de encapsulado utiliza el chip, cuánta energía necesitará y cuánto calor emitirá, explicó Velaga.
Broadcom no vende servidores por sí misma, pero ofrece a sus clientes los diseños de los componentes y sistemas que crea para las pruebas, con el fin de darles un punto de referencia para construir la infraestructura de red a su alrededor.
“Por cada dólar que invertimos en nuestro silicio, nuestros socios del ecosistema invierten al menos entre 6 y 10 dólares”, explica Velaga. “Así que gran parte de nuestra atención se centra en el diseño, como si estuviéramos casi listos para llevarlo a producción”.
(Reporte de Max A. Cherney en San Francisco; Editado en Español por Ricardo Figueroa)