LONDRES, 23 sep (Reuters) -La actividad empresarial de la zona euro creció en septiembre a su ritmo más rápido en 16 meses, pero los nuevos pedidos se estancaron tras una breve expansión en agosto, lo que podría suscitar inquietud sobre la sostenibilidad del crecimiento económico del bloque, según una encuesta.
El índice preliminar HCOB compuesto de gestores de compras de la eurozona, elaborado por S&P Global, subió a 51,2 en septiembre desde 51,0 en agosto, marcando el noveno mes consecutivo de crecimiento. Un sondeo de Reuters había pronosticado una lectura de 51,1.
Las cifras del PMI superiores a 50,0 indican crecimiento de la actividad, mientras que las inferiores a ese nivel apuntan a una contracción.
“La zona euro todavía está en una senda de crecimiento. No obstante, todavía estamos muy lejos de observar un impulso real”, declaró Cyrus de la Rubia, economista jefe de Hamburg Commercial Bank.
El índice que mide la demanda de nuevas empresas bajó de 50,3 a 50,0, el punto de equilibrio.
Los servicios impulsaron la expansión general, con un PMI del sector que subió a 51,4 desde 50,5 en agosto, la lectura más alta en nueve meses y cómodamente por delante de la estimación de Reuters de que no habría cambios. Sin embargo, el sector manufacturero perdió impulso y su índice general cayó a territorio de contracción hasta 49,5 desde 50,7 en agosto.
La encuesta puso de relieve una marcada divergencia entre las dos mayores economías del bloque. Alemania registró un sólido crecimiento, con una expansión de la actividad al ritmo más rápido desde mayo de 2023. Por su parte, Francia registró un descenso de la actividad empresarial por decimotercer mes consecutivo, con una aceleración de la tasa de contracción hasta alcanzar la mayor desde abril.
Los niveles generales de empleo se estancaron en septiembre, poniendo fin a una racha de seis meses de creación de puestos de trabajo, debido a que las empresas respondieron a la falta de crecimiento de nuevos negocios. Los fabricantes siguieron recortando puestos de trabajo, mientras que la contratación en los servicios se ralentizó hasta alcanzar su nivel más bajo en siete meses.
Las presiones inflacionistas disminuyeron durante el mes y tanto los costes de los insumos como los precios de producción aumentaron a un ritmo más lento.
Los costes de los insumos manufactureros disminuyeron por primera vez en tres meses, mientras que las empresas de servicios registraron un ritmo de inflación elevado, aunque más suave, y subieron sus precios al ritmo más débil desde mayo.
“La inflación de los costes en el sector servicios, que el Banco Central Europeo observa con mucho interés, ha disminuido ligeramente, pero sigue siendo inusualmente alta dado el frágil contexto económico”.
El BCE mantuvo los tipos de interés sin cambios a principios de mes y otro sondeo de Reuters afirmaba que el banco había terminado con los recortes.
(Información de Jonathan Cable; edición de Hugh Lawson; editado en español por Irene Martínez)