Por Andrew Goudsward
WASHINGTON, 24 nov (Reuters) -Un juez estadounidense desestimó el lunes cargos penales contra el exdirector del FBI James Comey y la fiscal general de Nueva York, Letitia James, porque la fiscal federal elegida por el presidente Donald Trump para llevar adelante los casos fue designada ilegalmente, en lo que supune un duro golpe a los esfuerzos para perseguir a quienes Trump considera enemigos.
El fallo desestima dos casos que Trump había solicitado públicamente al presionar a los líderes del Departamento de Justicia para que tomaran medidas contra figuras de alto perfil que lo habían criticado y habían liderado investigaciones sobre su conducta.
Lindsey Halligan, antigua abogada personal de Trump, fue nombrada fiscal federal interina del Distrito Este de Virginia en septiembre para hacerse cargo de ambas investigaciones, a pesar de no tener experiencia previa en la persecución penal.
(Reporte de Andrew Goudsward; edición en español de Javier López de Lérida)











