Por Katy Daigle y Simon Jessop y Kate Abnett
BELÉN/SAO PAULO, 4 nov (Reuters) -Ante un informe de la ONU que advierte de que las emisiones mundiales de carbono siguen siendo demasiado altas para detener el calentamiento global, el presidente de Brasil dijo el martes que la cumbre de la ONU sobre cambio climático que se celebrará este mes en la Amazonia será una “COP de la Verdad” y ofrecerá soluciones reales.
A pesar de tres décadas de negociaciones globales, los países no evitarán que el calentamiento supere los 1,5 grados centígrados, el principal objetivo del Acuerdo de París negociado hace una década. En su lugar, el mundo se encamina hacia un calentamiento extremo de entre 2,3 y 2,5 grados centígrados, dijo el martes el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente.
La previsión asume que los países cumplirán los compromisos que han hecho hasta ahora para reducir las emisiones. Si no lo hacen, el mundo se calentará aún más.
“Esto será difícil de revertir”, dijo el PNUMA sobre el rebasamiento de 1,5 ºC, señalando que los países tendrían que moverse aún más rápido y hacer reducciones aún mayores en las emisiones de gases de efecto invernadero para evitar un cambio climático fuera de control.
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, cuyo país acoge la COP30 del 10 al 21 de noviembre, dijo que el incumplimiento de los acuerdos climáticos anteriores -incluidos el Protocolo de Kioto y la financiación prometida para el clima- era desmoralizador para la gente de todo el mundo.
En declaraciones a la prensa en una base naval de Belén, Lula dijo que los países deben cumplir las promesas del pasado, en lugar de hacer otras nuevas.
“No queremos que la COP siga siendo una exposición o una feria de productos ideológicos sobre el clima, en la que cada uno vea lo que quiera, como quiera, y nadie esté obligado a hacer nada y a que las cosas sucedan”, dijo Lula.
“Queremos que sea muy seria, y que las cosas que decidamos se implementen”, dijo, señalando que algunos países “no están cumpliendo” el tratado de París que les compromete a limitar el calentamiento a “mucho menos” de 2ºC sobre los niveles preindustriales, trabajando para un límite en 1,5ºC.
El informe de emisiones de la ONU del martes señaló que la trayectoria actual de calentamiento era sólo 0,3°C inferior a la de hace un año, antes de la COP29 de Bakú, lo que significa que los nuevos planes anunciados este año han hecho poco por mover la aguja.
Brasil propondrá la creación de un nuevo consejo mundial de medio ambiente vinculado a la ONU y facultado para viajar y supervisar los avances en los compromisos climáticos en todo el mundo.
“Porque si no, no pasará nada. Un país dice ‘no voy a cumplir’ y no le pasa nada”, dijo Lula. “Así que la COP pierde su impulso, y pronto la gente ya no querrá participar, porque no tiene sentido”.
Kate Abnett (Bruselas) y Simon Jessop (Sao Paulo); Javier López de Lérida (edición en español)











