Por Nidal al-Mughrabi y Maayan Lubell
EL CAIRO/JERUSALÉN, 18 oct (Reuters) -El paso fronterizo de Rafah, en Gaza, permanecerá cerrado hasta nuevo aviso, dijo el sábado la oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, quien añadió que su reapertura dependerá de que Hamás entregue los cuerpos de los rehenes fallecidos.
“La apertura del paso fronterizo se considerará en función de la forma en que Hamás cumpla con su parte en la devolución de los rehenes fallecidos y la aplicación del marco acordado”, dijo la oficina de Netanyahu en un comunicado el sábado.
Hamás, en un comunicado emitido a última hora del sábado, afirmó que la decisión de Netanyahu “constituye una flagrante violación del acuerdo de alto el fuego y un repudio de los compromisos que contrajo con los mediadores y las partes garantes”.
También dijo que el cierre continuado del paso fronterizo impediría la entrada del equipo necesario para buscar y localizar más cuerpos de rehenes bajo los escombros, y retrasaría así la recuperación y entrega de los restos.
Israel informó que había recibido otros dos cadáveres de rehenes a última hora del sábado, lo que significa que 12 de los 28 cuerpos han sido entregados.
La embajada palestina había dicho más temprano el sábado que el paso se reabriría en 48 horas, casi una semana después de que Israel y Hamás acordaran un alto el fuego y lograran un entendimiento sobre los rehenes con la mediación de Estados Unidos.
La reapertura del cruce, que ha estado cerrado en gran medida desde mayo de 2024, permitirá a los palestinos que residen en Egipto regresar a Gaza, había dicho la embajada en un comunicado.
Desde que Estados Unidos puso fin a dos años de guerra han entrado en la Franja de Gaza un promedio de 560 toneladas métricas de alimentos al día, una cantidad muy inferior a las necesidades, según el Programa Mundial de Alimentos de la ONU.
El paso se cerró a la ayuda en mayo de 2024, pero se reabrió a principios de este año durante un breve alto el fuego entre ambas partes.
Tras dos años de bombardeos y bloqueo, la necesidad de alimentos, medicinas y otras ayudas en Gaza es extrema. En marzo, Israel inició un bloqueo de 11 semanas de toda la ayuda al enclave, lo que provocó que las reservas de alimentos disminuyeran y los precios se dispararan.
En agosto, un observatorio mundial del hambre dijo que se estaba produciendo una hambruna en la ciudad de Gaza, pero Israel tachó las conclusiones de falsas y tendenciosas.
Las autoridades sanitarias de Gaza afirman que más de 400 personas han muerto por causas relacionadas con la desnutrición, pero Israel sostiene que las cifras son exageradas y que muchos decesos tienen otras causas.
Israel niega que haya limitado la ayuda al enclave.
(Reporte de Hatem Maher, Ahmed Tolba y Nidal Al-Mughrabi. Editado en español por Javier Leira)