Por Jeff Mason y Nandita Bose y Gram Slattery
WASHINGTON, 17 oct (Reuters) -Volodímir Zelenski visitó el viernes la Casa Blanca para pedir misiles Tomahawk a Donald Trump, pero el foco del presidente estadounidense en su próxima reunión con su par ruso, Vladimir Putin, en Budapest, planteó la posibilidad de que esté más decidido a negociar la paz que a mejorar el arsenal de Kiev.
Aunque Trump no descartó la posibilidad de proporcionar los misiles Tomahawk de largo alcance que Zelenski busca, pareció enfriar esa perspectiva.
La decisión de Trump de volver a entablar un diálogo con Putin, una estrategia que ha frustrado a Kiev y a algunos aliados europeos en el pasado, ensombreció el cordial encuentro.
Antes del almuerzo privado con Zelenski, Trump dijo que los hablarían de su conversación del día anterior con Putin. “Las cosas van bastante bien”, destacó.
Zelenski señaló lo difícil que ha sido intentar asegurar un alto el fuego. “Nosotros lo queremos. Putin no lo quiere”, dijo.
Zelenski sostuvo que Ucrania tiene miles de aviones no tripulados, pero necesita misiles. “No tenemos Tomahawks, por eso necesitamos Tomahawks”.
Trump respondió: “Vamos a hablar de Tomahawks. Preferiríamos que no necesitaran Tomahawks”.
El mandatario se presentó como un mediador y reiteró su creencia de que ambas partes buscan un acuerdo de paz. “Creo que el presidente Zelenski quiere que se haga, y creo que el presidente Putin quiere que se haga. Ahora todo lo que tienen que hacer es llevarse un poco bien”, destacó.
Trump anunció el jueves la reunión con Putin en dos semanas en Budapest, después de una conversación telefónica de más de dos horas sobre la guerra que, según dijo, fue productiva.
No estaba claro qué le había dicho Putin a Trump para que aceptara la reunión, ya que su cumbre de agosto en Alaska terminó antes de tiempo sin ningún avance importante.
El Kremlin dijo que quedaba mucho por decidir y que la cumbre podría celebrarse “un poco más tarde” del plazo de dos semanas mencionado por Trump.
“ESTÁ GUAPÍSIMO”
El tono conciliador de Trump tras la llamada con Putin planteó dudas sobre la probabilidad a corto plazo de ayuda a Ucrania y reavivó el temor en Europa a un acuerdo que convenga a Moscú.
Pero también expresó su afecto por Zelenski, y en un momento dado le elogió por llevar un traje oscuro, después de que a principios de este año se le llamó la atención por visitar la Casa Blanca con una vestimenta informal.
“Creo que está guapísimo con su chaqueta”, dijo Trump. “Espero que la gente se dé cuenta (…) es muy elegante. Me gusta”.
Trump, que hizo campaña para recibir el premio Nobel de la Paz, está ansioso por engrosar la lista de conflictos a cuyo fin dice haber contribuido.
Tras la reunión, Zelenski dijo que tuvo una reunión productiva con Trump. “Confiamos en que (el republicano) quiere poner fin a la guerra”, destacó.
Más de tres años y medio después de su invasión a gran escala de Ucrania, Rusia ha logrado algunos avances territoriales este año, pero el máximo comandante militar ucraniano, Oleksandr Syrskyi, dijo el jueves que la ofensiva rusa había fracasado.
Putin aseguró este mes que sus fuerzas habían capturado casi 5.000 kilómetros cuadrados de territorio ucraniano en 2025, lo que equivale a añadir un 1% del territorio ucraniano al casi 20% que ya poseían.
Ambas partes también han intensificado sus ataques a los sistemas energéticos de la otra y aviones no tripulados rusos se han adentrado en países de la OTAN.
En los últimos días, la Casa Blanca parecía cada vez más frustrada con Putin e inclinada a conceder a Zelenski un nuevo apoyo, incluidos los misiles Tomahawk que, según los ucranianos, les ayudarían a infligir más daño a la maquinaria bélica rusa.
Zelenski, que ha tenido una relación con altibajos con Trump, dijo que Putin, que siguió adelante con los asaltos a Ucrania después de la reunión en Alaska en agosto, está de nuevo jugando con el tiempo.
“Ya podemos ver que Moscú se apresura a reanudar el diálogo en cuanto se entera de los Tomahawk”, escribió en la red social X.
Durante la conversación del jueves, Putin dijo a Trump que suministrar misiles de largo alcance a Ucrania perjudicaría el proceso de paz y dañaría los lazos entre Estados Unidos y Rusia, dijo a la prensa Yuri Ushakov, asesor del Kremlin.
(Reporte de Jeff Mason y Trevor Hunnicutt; reporte adicional de Olena Harmash en Kiev, Cassel Bryan-Low y Tom Balmforth en Londres, Daphne Psaledakis en Washington, Bhargav Acharya en Toronto, Anita Komuves en Budapest y Anastasia Lyrchikova en Moscú; editado en español por Carlos Serrano y Javier Leira)